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BRR #3. 

Nuevo número del fanzine del Laboratorio de Interferencias Artísticas y Mediales (IAMlab)

Departamento de Arte de la Universidad Miguel Hernández de Elche, formado por: Teresa Marín García, Patricia Escario Jover, Bernabé Gómez Moreno

​Elisa Lozano Chiarlones, José Maldonado Gómez, Rocío Villalonga Campos y Eduardo Marín Sánchez.

elimbo* tiene el placer de colaborar con el Laboratorio generando un espacio on-line en el cual mostrar digitalmente el fanzine (uno de sus estados).

En esta ocasión IAMlab inicia una investigación referida a métodos y sistemas de almacenaje y conservación. 

Próximamente más.... 

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B

Imagen:  F. Eveleens, 2020, Depot Boijmans Van Beuningen

https://en.wikipedia.org/wiki/Depot_Museum_Boijmans_Van_Beuningen#/media/File:Rotterdam_depot_boijmans.jpg


El almacén, lugar “donde se depositan géneros de cualquier especie, generalmente mercancías” [RAE], tiene como ámbito original el de la logística. El empleo de almacenes en el entorno del arte comienza a crecer con la creación de los museos en el siglo XIX (el Louvre, hijo de la Revolución, es de 1793), y se incrementa de manera exponencial desde el último tercio del siglo XX, debido al fuerte aumento del comercio en las galerías de arte y a la contribución de los museos a la industria del ocio y el turismo mundial. En cuanto a las artistas [fem. gen.], no tuvieron una necesidad destacable de almacenar hasta que el grupo impresionista comenzó a crear sus obras a un ritmo muy superior al de la demanda, que en algunos periodos de las décadas de los 1880 y 1890 fue casi nula. En contraste con la eficiencia y la rotación del almacenaje en la cadena de suministro de los bienes agrícolas o industriales, por ejemplo, las artistas y galeristas sufren cada vez más la existencia de cuellos de botella en sus stocks debido a un fuerte desajuste estructural entre la producción, la oferta y la demanda. Una consecuencia inevitable de esta situación es la destrucción de sus obras por parte de las artistas, incapaces de almacenar todo lo que producen.

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Llevaba días en casa haciendo fotos y jugando con varias cajas de construcción que me había prestado mi vecina Marteta, porque con las piezas y sus limitaciones de colores y número podía reflexionar sobre los conceptos de libertad y elección, también pensaba sobre la caja-cubo y nuestra forma, un poco loca, de vivir en cubos y almacenar en otros cubos o cajas. Pero al segundo día noté que me aburría. Por eso, esta mañana he cogido a las perras y mi riñonera y me he ido al campo a jugar con los rastrojos.

¿Y si somos más de Rastrojo y Riñonera?

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Almacén de resonancias…

Recipiente de la meditación y cuenco cantor. Por impacto o fricción entran en resonancia la oración y la vibración del metal. Las dos son una en la salmodia que trata de disgregar el alma en el mundo a través de su contexto inmediato. Ambas quedan contenidas, almacenadas, en la duración de la resonancia… hasta que se pierden y separan: el alma siempre vuelve, esa es la esperanza, no ser abarcado por la totalidad, sino contenido en lo mínimo.

La O en braille se diferencia por un punto situado en el centro de la primera columna; la R lo tiene, la O no: un punto de diferencia¡!

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de Rincón.

Acumulador natural de entropía.

Los rincones son ecosistemas óptimos para el estudio de la entropía del universo.

Dada una habitación con juguetes ordenados lógicamente por un adulto, la entropía de sus rincones aumenta tras el paso de un niño por dicha habitación.

Los adultos solemos identificar esta entropía como desorden o caos. 

Hipótesis: A los ojos de los niños tal vez se trata de un proceso de dispersión, reparto y multiplicidad que favorece la combinación creativa de los diferentes juguetes. 

Aunque el adulto reordene de la misma manera lógica los juguetes día tras día, el niño reestablecerá la carga entrópica del rincón sin repetir nunca el mismo tipo de dispersión y reparto de los juguetes.

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DICCIONARIO DE USO DEL ESPAÑOL (de María Moliner)
 

Los diccionarios de lenguas contienen repertorios de términos y sus descripciones de significado básico que nos permiten comunicarnos, comprender una lengua y hacernos entender. Un diccionario de uso de una lengua, es un tipo de contenedor peculiar, no solo recoge palabras y sus definiciones, sino que las acompaña de su valor “de uso”. Un contenedor exponencial de significados e itinerarios cruzados que invita al vagabundeo y al tránsito hipertextual. Un diccionario no es solo un almacén, es también un dispositivo que permite viajar “de la idea a la expresión”, albergando infinitas posibilidades de construcción de relatos y por extensión de mundos posibles.

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Símbolo inequívoco de una generación. Una simple bolsa de plástico contiene en sí misma todos los anhelos, esperanzas y flaquezas de nuestra cultura. Capaz de albergar todo tipo de cosas, aire, tierra, comida, agua, casi cualquier cosa que podamos imaginar. Este recipiente se convierte en protagonista de un fin de ciclo en el que la idea de su uso y abuso es sinónimo de contaminación, exceso y degradación. Un contenedor que se adapta sinuosamente a su contenido, que disimula y se camufla; casi como un depredador. La concienciación ecológica sobre su desaparición altera nuestra dinámica vital y modifica la forma en la que habitamos el mundo.

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R

Reflexionar empieza por R, la letra elegida. Reflexionar sobre almacenaje. Almacenaje infinito; carpetas dentro de carpetas, carpeta de la letra R, subcarpeta RE, sub-sub-carpeta REF y así hasta encontrar la carpeta reflexionar. Todo concluye en hacer (re) flexiones para almacenar energía muscular y estar a tono.

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